“Una quilla sobre el páramo”

Fotocrónicas (CCIV)

Como una afilada quilla de ágil y veloz bergantín, el castillo de Zafra parece cortar el aire de una fría tarde de invierno en la meseta castellana. Estamos en el municipio de Campillo de Dueñas, comarca de Molina de Aragón, en el oriente de la provincia de Guadalajara. Sobre un promontorio rocoso de conglomerados y areniscas rojizas, esta vieja fortaleza resiste el paso del tiempo y soporta las duras inclemencias climatológicas.   

La historia del castillo de Zafra se hunde en la noche de los tiempos. Parece evidente que desde la Edad del Bronce este roquedo ha servido de sustento a sucesivas fortalezas de romanos, godos, musulmanes y cristianos. En 1479 pasa a manos de los Reyes Católicos. Completada la Reconquista, el valor de este castillo pierde importancia e inicia su decadencia y ruina.      

En 1975, Antonio Sanz Polo compra por 30.000 pesetas los despojos de esta fortaleza. Con el apoyo del maestro albañil Jesús Casado, comienza una labor encomiable por recuperar la historia del castillo y reconstruir su esbelta figura. Desde luego que lo consiguió, hasta tal punto que, años después, la productora HBO eligió este rincón para filmar varias escenas de la serie Juego de Tronos porque “buscaban un lugar remoto y muy solitario”. Sin duda que el paraje y el paisaje cumple plenamente esos requisitos…

Texto y fotografía: Jesús Mª Escarza Somovilla