“Puente Laidiez»

Fotocrónicas (XLIV)

         Ernesto Reiner dice en su necesario libro Viaje por el Camero Viejo: “… donde un puente perdido aguarda a que le expliquen porqué, hace mil o dos mil años, aquí lo pusieron con sillares perfectamente escuadrados, fabricados con piedra llena de burbujas grises y ocres, surcada de alguna veta carmín…”

         En el camino entre Ribafrecha y Leza aguanta el transcurrir del tiempo y de las aguas este increíble puente, reliquia de un pasado que parece ya demasiado ajeno y perdido. Con seguridad que daba servicio al tránsito de personas, ganados y mercancías a lo largo del valle. Un poco más arriba del puente se levanta la ermita románica de la Virgen del Plano.

         Ahora, la tierra se viste de choperas, olivos, almendros, frutales y viñas, que dulcifican un paisaje de por sí áspero y seco. Por la derecha del río las laderas se desploman desde la Muralla de Zenzano; por la izquierda, bajan desde los riscos del Monte Laturce y Peña Aguda, siguiendo el silvestre barranco de la Barriguilla. 

Texto y fotografía: Jesús Mª Escarza Somovilla